martes, 24 de enero de 2012
Henri Matisse dijo ''Dibujar es como hacer un gesto expresivo con la ventaja de la permanencia''.
Al usar acuarela, se logra lo contrario al dibujo: la circulación del ''agua coloreada'' sobre el papel, logra un constante fluir que parece no tener permanencia en el tiempo, ni siquiera en nuestra cabeza.
De este modo, el proyecto para este taller logra su objetivo mencionado anteriormente: al juntar las obras, se percibe la idea de la problemática de la expresión. Simplemente no puede haber una representación permanente, fija, que encierre totalmente una sola expresión; las emociones a la vez son tan mutables, que siguen perfectamente este movimiento continuo.
Luego de un riguroso trabajo de búsqueda de colores, tamaños, formas, técnicas, etc., se procede a realizar las primeras obras. Para ello, se sigue una serie de etapas, que consisten, primero, dibujar de forma sutil las líneas más significativas de expresión, tales como el labio, el arco de las cejas,las 'ojeras' y nariz. Segundo, se aplica una capa de color claro, que sería la base. Luego se incorporan otras capas, conformando así colores más oscuros para resaltar ciertas zonas y poder concordar una figura que pueda explicarse a través del fluir de las manchas. Se trata de abstraer la expresión por medio de la mancha de acuarela.
Se van escogiendo obras que serán parte del la selección para el proyecto final.
El objetivo del proyecto es logrado gracias al uso de la técnica de acuarela, pues el agua, y su circulación, siguen de manera fluida los movimientos de las líneas de expresión.
De este modo, la primera etapa de este trabajo sería la exploración de color y como este funciona con el soporte de papel.
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